Monotonía

Te alejas de la oscuridad que sientes en ese minuto, tomas simplemente lo justo y necesario, por que necesitas salir del lugar en donde nadie estaba, tomas la primera ruta sin mirar a nadie, recoges tus hombros, te sientas y el viento roza tu cara de una manera delicada. Comienza este viaje en donde no sabes a donde iras, luego de un rato logras mirar a tu entorno, tus ojos están llorosos, y aun así a nadie le importa, por fin logras dar un suspiro que sostenga la situación, miras por tu ventana, todo un mundo, millones de historias, personas, vidas, muertes, peleas, risas y tu sin encajar en nada, comienzas a recordar tu historia, tus momentos felices, esas tarde en donde los sueños se hacían realidad, te acuerdas de esa noche mas oscura que las otras en donde tus lagrimas no se contuvieron… y regresas a la realidad queriendo volver atrás , dejar tus pensamientos, tus miedos y ser libre, por un momento querer olvidarlo todo, pero llega el momento de bajarte , solo por que tu lo decides, caminas por la ciudad con un tibio café entre tus manos, miras las hojas caer detenidamente. Por un momento te quedas sola en ese lugar tan frió y lloras, lloras durante largos minutos, lloras sin pensar en el tiempo, y sin ni un cuestionamiento alguno, por fin lograste quitar todo ese peso de encima, toda esa pena y angustia que tenías…
Vuelves con toda esa gente que siguen sin importarles lo que te pasa. Tomas la ruta de vuelta a tu casa, con la cabeza hacia abajo, sin mirar a nadie, te bajas, sacas tus llaves, abres la puerta con cierta inseguridad quizás con alguna esperanza de que algo cambió, al abrirla te das cuenta que todo sigue igual, hasta el vaso de leche que dejaste en tu mesa sigue intacto, te vuelves a sentir sola, miras cada rincón de tu casa queriendo ver un cambio … pero todo sigue igual, es aquí en donde te miras a tu espejo, secas tus lagrimas, te resignas a la monotonía de tus días y respiras… solo respiras.